Ese año 2021 “fue decisivo para Tesla y para los vehículos eléctricos en typical”, destacó su consejero delegado, Elon Musk en la conferencia con analistas del pasado invierno. Un ejercicio marcado por los problemas globales en las cadenas de suministro y por la falta de microchips, que castigaron especialmente a la industria del automóvil